La guía completa de la Tasa de Rebote: definición, causas y soluciones.
¿Qué es la Tasa de Rebote o Bounce Rate?
La Tasa de Rebote mide el porcentaje de visitantes de un sitio web que abandonan sin haber interactuado con él. No acceden a otras páginas. No rellenan ningún formulario. No realizan una compra. Llegan y se van.
Esta métrica de analítica web a menudo es una gran causa de preocupación para nuestros queridos equipos de Marketing.
Sin embargo, nos puede proporcionar insights valiosos sobre el comportamiento de nuestros usuarios durante su experiencia de llegada a nuestra plataforma. Los primeros diez segundos que un visitante pasa en nuestra página son vitales para el resto de su recorrido. Sin embargo, una tasa de rebote alta no siempre significa lo mismo. Como veremos más adelante, es importante considerar el contexto y el tipo de página que estamos analizando.
¿Cómo se mide la Tasa de Rebote?
Pongamos que una página tiene 100 visitantes, 30 de ellos sólo llegan a la landing page (la página en la que aterrizan primero) y la abandonan sin interactuar. Entonces la página tiene una Tasa de Rebote del 30%.
Dividimos los visitantes de una sola página entre los visitantes totales que aterrizan en esa página primero y multiplicamos por cien para obtener el porcentaje de rebote.
Es importante tener en cuenta que los rebotes no solo ocurren en la página de inicio, ya que muchas veces el recorrido del usuario empieza directamente en otra página, como una página de categoría o de producto. Por eso es vital seguir optimizando todas las páginas de un sitio web, para asegurar que no reboten los usuarios independientemente de la página en la que aterricen.
¿La Tasa de Rebote afecta al SEO?
La Tasa de Rebote no se considera una métrica que afecta directamente al SEO. Esto se debe a que es difícil comparar la tasa de rebote de una página con otra. En muchos casos, las tasas de rebote altas son completamente normales. Por ejemplo, si alguien entra en este blog, lo lee durante 5 minutos y luego sale de la página, contaría como un rebote ya que el visitante no ha interactuado con ninguna otra página. Sin embargo, esto no significa que no haya encontrado lo que buscaba o que no haya tenido una experiencia de usuario satisfactoria.
Ahora sí, en algunos casos, una tasa de rebote alta puede ayudarnos a identificar problemas que sí afectan directamente a nuestro posicionamiento SEO, cómo la velocidad de carga o la experiencia de usuario.
En resumen, si estás intentando mejorar tu posicionamiento de SEO y ves que una página tiene una tasa de rebote alta, no entres en pánico. Tu tasa de rebote no define la calidad de tu página.
Tasa de Rebote vs. Tasa de Salida
Confundir la tasa de rebote con la tasa de salida es bastante común. Lo cual no es sorprendente, ya que ambas métricas se centran en visitantes que abandonan la página por algún motivo. La principal diferencia es la siguiente:
Tasa de Salida: Porcentaje de visitantes que terminan su recorrido en una página.
Tasa de Rebote: Porcentaje de visitantes que empiezan y terminan su recorrido en una página, sin interactuar con ella ni avanzar a otras.
Pongamos un ejemplo.
CASO 1: Pepito entra entra en la página A de una web, no le gusta lo que ve y cierra la página. Pepito ha rebotado.
CASO 2: Juanito entra en la página A de una web, ve un producto que le interesa y avanza a la página B. Decide comprarlo, acaba su pago en la página C y cierra la página. Pepito ha salido.
Entonces, ¿Cómo se calcula la Tasa de Salida?
Dividimos las salidas de una página entre las visitas totales a la misma, sin importar que sea la página de aterrizaje o no.
Pongamos otro ejemplo:
Imagínate un sitio web con tres páginas (A, B y C) y una única sesión por día.
Lunes: Página B → Página C → Salida
Martes: Página A → Página C → Página B → Salida
Miércoles: Página A → Salida
Jueves: Página C→ Salida
Viernes: Página C → Página B → Página A → Salida
Si aplicamos las fórmulas que hemos mencionado antes, obtendremos los siguientes resultados.
- Página A: La tasa de rebote es del 50% y la tasa de salida es del 66%
- Página B: La tasa de rebote es del 0% y la tasa de salida es del 33%
- Página C: La tasa de rebote es del 50% y la tasa de salida es del 0%
Recuerda: No todas las salidas son rebotes, pero todos los rebotes son salidas.
Factores que afectan a la Tasa de Rebote
Ahora que sabemos definir y calcular la tasa de rebote, es hora de entender por qué nuestros visitantes rebotan (o no). Cómo ya hemos visto, no todos los rebotes indican que haya un problema en la web. Aun así, existen algunos factores que pueden afectar a nuestra tasa de rebote. Veámoslo:
A) Tiempo de carga
Un usuario entra en una página web, esta tarda demasiado tiempo en cargarse y el usuario cierra la página o vuelve a los resultados de búsqueda. Esto es algo que nos ha pasado a todos en algún momento y puede resultar muy frustrante.
Hoy en día estamos acostumbrados a tiempos de carga prácticamente inexistentes. Tendemos a exigir una satisfacción inmediata de lo que buscamos. ¿Queremos ver una peli? Hacemos clic en una de Netflix y ya está cargada. ¿Queremos escuchar una canción? Le pedimos a Alexa que la ponga desde Spotify y listo. Lo mismo pasa con nuestras expectativas de tiempo de carga en páginas web. La media de tiempo que un usuario está dispuesto a esperar para que se cargue una página es de 2 segundos. Todo lo que supera los 2 segundos empieza a afectar directamente a la tasa de rebote.
Además el tiempo de carga afecta directamente a nuestro posicionamiento SEO, así que definitivamente es una métrica que no se debe ignorar.
Más adelante en este blog recomendaremos algunas estrategias para reducir el tiempo de carga.
B) Experiencia de usuario
Puede parecer obvio pero vale la pena mencionar que si no ofrecemos una buena experiencia de usuario, estos abandonarán nuestra página, muchas veces en cuanto aterrizan en ella.
¿Pero qué es exactamente una buena experiencia de usuario?
Es difícil resumir este concepto, ya que depende de muchos factores contextuales y la experiencia de usuario o UX es un estudio al que podríamos dedicar varios blogs.
Sin embargo, hay tres características principales que comparten todas las páginas con una UX satisfactoria. Una página de este tipo es:
- Usable: los usuarios pueden alcanzar su objetivo en la página de forma eficiente, intuitiva y rápida.
- Agradable: todos los elementos de la página colaboran en la creación de una imagen de la marca agradable y coherente
- Útil: el contenido de la página es relevante para los usuarios que han aterrizado en ella. A continuación analizaremos este punto en más profundidad.
C) Contenido relevante
Es importante que el contenido de tu página esté siempre relacionado a la razón por la que los usuarios visitan tu página. Por ejemplo, si tu página es un eCommerce que vende zapatos, no pondrías un video de unos gatos en tu página de inicio. Tus clientes potenciales quieren zapatos. Enséñales zapatos.
Para asegurarte de que el contenido de tu página es relevante para las personas que la están encontrando debes prestar atención a tres cosas:
- Palabras clave: el uso de palabras clave relevantes incrementan la posibilidad de que tu contenido atraiga a la audiencia deseada. No importa la cantidad de estrategias de adquisición de tráfico que estés implementando si el tráfico que atraes no es el correcto.
- Meta-descripciones: cuando buscamos algo en google, lo primero que leemos después del título de una página es la meta-descripción. Estos 155 caracteres muchas veces son la primera toma de contacto entre el usuario y tu página, por lo que debemos asegurarnos que sea lo más relevante y captivador posible.
- Perfiles de clientes: para crear contenido relevante es necesario saber a quién nos estamos dirigiendo. Más adelante veremos algunas herramientas que nos pueden ayudar a entender a nuestro público objetivo.
Más allá de crear contenido relevante, la clave está en crear contenido de valor. Si un visitante aterriza en tu página y está optimizada para su perfil y sus preferencias de contenido, no rebotará. O por lo menos no rebotará por una razón negativa.
¿Qué es una tasa de rebote buena?
Responder a esta pregunta no es tan fácil como decir si tu tasa de rebote es mayor que x% tienes un problema. El contexto, tipo de página, objetivo y visitante todo influye sobre el análisis de una tasa de rebote.
Cómo bien dijo Einstein: “Si juzgas a un pez por su habilidad para trepar árboles, pensará toda la vida que es un inútil.”
Lo mismo pasa si juzgas todas las páginas web según las mismas expectativas de tasas de rebote. Por ejemplo, imagina que tienes una página web de una galería de arte. En la página de inicio incluyes el horario de apertura y la ubicación. Puedes correr el riesgo de malgastar recursos optimizando una y otra vez la misma página porque tiene una tasa de rebote alta, cuando en realidad la mayoría de visitantes están rebotando porque buscaban justamente esa información.
Cómo interpretar tu tasa de rebote
En Google Analytics lo explican de la siguiente forma: “Si los buenos resultados de su sitio web pasan por que los usuarios visiten más de una página, entonces un porcentaje de rebote sí es un factor negativo. Por ejemplo, si a través de su página principal se accede al resto del sitio (p. ej., artículos de noticias, páginas de producto o el proceso de tramitación de compra) y hay un elevado porcentaje de usuarios que solo visita dicha página, el porcentaje de rebote debería ser lo más bajo posible.”
¿Cómo puedo reducir la tasa de rebote?
Esta siempre es la pregunta del millón, pero lo que realmente deberíamos preguntarnos es cómo podemos mejorar el engagement en nuestra página. Cómo ya hemos mencionado, tener una tasa de rebote alta no es el fin del mundo si estamos cumpliendo el objetivo del visitante y si este está interactuando con nuestra página de forma óptima.
Averigua cuáles son las páginas de tu sitio web que requieren atención. Tendrás que tener en cuenta otras métricas junto con la tasa de rebote. Por ejemplo, si tienes una página con una tasa de rebote alta y un tiempo de permanencia bajo, algo no está funcionando. Considera nuestras recomendaciones a continuación para embarcarte en tu viaje de optimización.
Nuestros 6 consejos para optimizar tu tasa de rebote
1. Reducir el tiempo de carga de la página
Ya hemos establecido que somos todos unos impacientes. Si entramos en una página y no se carga, nos largamos. Un tiempo de carga excesivo puede ocurrir por varios motivos:
- Archivos JS y CSS sin comprimir
- La ausencia de CDN
- La falta de caché de páginas con CMS
- Archivos de imagen grandes y sin optimizar
Puedes utilizar una herramienta gratuita como Pingdom Website Speed Test para averiguar la velocidad de tu página y los posibles problemas que la estén ralentizando.
2. Revisar analíticas de la web
No basta con saber cuál es la tasa de rebote de una página, para empezar a optimizarla. No podemos solucionar un problema sin saber la causa. Sería como tirar dardos a una diana con los ojos vendados.
Debemos considerar el tiempo de permanencia, por donde entra un usuario, en qué parte de la página se encuentra cuando rebota, el tipo de usuario que no está avanzando a otras páginas, etc.
Toda esta información está a nuestro alcance, siempre que dispongamos de las herramientas correctas. Por ejemplo, Dorado Fashion, un ecommerce estadounidense de moda y accesorios, usó los heatmaps para identificar un problema con su barra de búsqueda en dispositivos móviles. El análisis de este problema fue el primer paso hacia un incremento de conversiones del 80%. Puedes leer la historia completa aquí.
3. Mejorar la experiencia móvil
No hay nada más frustrante que una barra de búsqueda inalcanzable cuando visitas una página web usando el móvil. La mayoría del tráfico de páginas web hoy en día proviene de dispositivos móviles.
Asegúrate de que los usuarios que lleguen a tu página usando un móvil o un ipad reciban la misma calidad de experiencia que cualquier otro usuario. También es recomendable comparar la experiencia en diferentes tipos de móviles.
Puedes empezar por comprobar que todo el contenido es visible, la navegación por la página funciona correctamente y las imágenes se vean correctamente en tamaño reducido.
4. Evitar el uso de pop-ups
Imagina que estás leyendo un libro. De repente alguien te cierra el libro para decirte algo. Aunque sea algo importante, te ha interrumpido, ya no sabes por qué página ibas y no vuelves a retomar la lectura. Lo mismo pasa con los pop-ups.
Existen formas mucho menos agresivas de ofrecer la información que queremos transmitir en un pop-up. Considera usar un banner discreto o un link interno que encaje de forma natural en la estructura de la página. Incluso cuando se trata de un chatbot de ayuda, existen mejores maneras de ofrecer ayuda a nuestros visitantes que asomarse cada cinco minutos preguntando si necesitan algo.
Este consejo también está relacionado directamente con el anterior. Un pop-up en un dispositivo móvil a menudo puede cubrir la pantalla entera, lo cual supone una interrupción completa de la experiencia de nuestro usuario.
5. Usar links internos
Cómo acabamos de ver, usar links internos es una manera estupenda de animar a los visitantes a explorar otras páginas de nuestro sitio web y, en ocasiones, una forma de que ingresen en la siguiente etapa de nuestro embudo de conversiones.
Aun así asegúrate de que los links sean relevantes y coherentes con la experiencia que quieras ofrecer a cada visitante. Destaca las palabras clave adecuadas para que tenga sentido la transición de una página a otra.
6. Optimizar el contenido
La legibilidad, organización y relevancia de tu contenido son factores imprescindibles para aumentar el engagement de tus usuarios y reducir la tasa de rebote.
Cada elemento de tu página contribuye a crear una imagen coherente de tu marca. Optimiza el uso de textos, gráficos, imágenes y CTAs en tu página constantemente para ofrecer la mejor experiencia posible a todas y cada una de las personas que interactúan con tu página.
Pero ofrecer contenido relevante y bien redactado no es suficiente, si está mal estructurado. Por ejemplo, imagina que un usuario busca en Google “Cómo atar una corbata” y aparece una entrada de un blog con el mismo título. Aterriza en el blog y lo primero que se encuentra son 5 páginas sobre la colección de corbatas del abuelo del autor, antes de llegar finalmente al video de demostración. Es muy posible que este visitante rebote antes de cumplir su objetivo.
Herramientas clave
Optimizar tu página web requiere conocer a tus usuarios y para conocer a tus usuarios necesitas las herramientas adecuadas.
1. Tests A/B
Los tests A/B permiten crear variaciones de una página web, en las que se modifican uno o varios elementos para comparar los resultados y encontrar (o no) una variación ganadora.
Elementos que se podrían testear en una página de aterrizaje:
- Calls-to-actions
- Layout
- Compatibilidad con dispositivos móviles
- Formularios
- Imágenes
Puedes echar un vistazo a nuestra guía de A/B Testing para averiguar más.
2. Mapas de calor
Los mapas de calor o Heatmaps te permiten observar cómo interactúan los usuarios con tu página y qué elementos les atraen o distraen.
En el caso de Heatmaps dinámicos, puedes observar estos comportamientos a tiempo real.
Son una herramienta increíblemente útil para poder crear hipótesis y Tests A/B que se basan en datos y no en opiniones personales.
3. Grabaciones de sesiones
Las grabaciones de sesiones de usuarios pueden ayudarte a entender en más profundidad el recorrido del visitante. Estas grabaciones te permiten rastrear el movimiento del ratón y donde se encontraban los visitantes antes de abandonar la página.
Es posible incluso segmentar a los visitantes, para poder observar el comportamiento de un grupo específico con parámetros customizables.
Conclusion
No dejes que tu tasa de rebote te cause pánico. Puede aportar información importante para empezar a optimizar tu página web y la experiencia de tus usuarios.
Recuerda:
- Una tasa de rebote alta no significa lo mismo para todas las páginas
- El objetivo es ayudar a los visitantes a cumplir su objetivo
- Donde hay un problema, hay una solución. Si quieres ver las herramientas que hemos recomendado en acción, puedes hacerlo con nuestra prueba gratuita.
Para más información y consejos prácticos, descárgate nuestra «Guía Completa Para Mejorar tus Conversiones en 60 Días».